A pesar de que le quedan seis meses de contrato. La CD deberá intervenir.
Complicada es la situación que atraviesa Matías Giménez respecto a su presente futbolístico y contractual. El volante, que pertenece a Boca, se había ido a San Lorenzo a préstamo por un año porque no tenía lugar con Falcioni, y ahora, seis meses antes de que termine su contrato, reapareció en Casa Amarilla. ¿Qué pasó?
A Giménez, como a tantos otros, no le pagaron los últimos meses de sueldo en el Bajo Flores y a modo de queja se entrenó junto a la Reserva de Boca. Es claro su interés de vestir nuevamente la casaca xeneize (no logró adaptarse como quería en el Ciclón), pero su destino está ahora en manos de la dirigencia. Su transacción está directamente relacionada al caso de Rivero, a quien Boca quiere comprar y asegurárselo para lo que viene, por lo cual San Lorenzo quizás exigirá algún tipo de resarcimiento.
Durante la práctica de este lunes, bajo la lluvia y el frío, se lo vio a Mati charlando con Sanguinetti, ayudante de JC. ¿Qué pasará con él?
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