martes, 17 de enero de 2012

Instituto : Darío Franco: En el plantel hay buen ánimo



Si habitualmente Darío Franco está enfocado a pleno en el trabajo de Instituto, durante la pretemporada el entrenador aumenta su compromiso a niveles que parecen exagerados. Se lo puede ver debatiendo con su cuerpo técnico o sentado con su computadora diagramando trabajos. También se arrima y bromea con los jugadores y durante las prácticas repite una y otra vez los ejercicios hasta que salgan bien.

Como ayer, cuando en los trabajos con los volantes centrales les indicaba los movimientos de descarga y desmarque, de la misma manera que él lo hacía en Newell’s, la selección o en México. El entrenador albirrojo está metido todo el día con su equipo y celebra que todo marche como lo había planificado. “Estamos bien. No hemos tenido contratiempos de lesiones graves. Sólo una pequeña molestia de Diego (Lagos), pero los demás están todos bien, trabajando sin problemas. Viste que los trabajos son muy exigentes, pero hay muy buen ánimo y eso hace que el trabajo se soporte de mejor manera”, cuenta el DT, mientras desenvuelve un chupetín, al mejor estilo Marcelo Bielsa.

En Balcarce, la Gloria encontró el circuito de entrenamiento ideal y, además, la cordialidad de la gente, que ya hace fuerza para que llegue a Primera. “Encontramos todo lo que se necesita, a mi entender, para hacer una muy buena pretemporada: tranquilidad, comodidad sobre todo en los desplazamientos a los lugares para entrenar, la amabilidad y cordialidad de toda la gente, principalmente del hotel, el gimnasio, el comedor y en la cancha”, afirma Franco.

“Los lugares están muy bien: se come muy bien y en el hotel tenemos exclusividad y eso hay que agradecerlo. La cancha está muy buena, el gimnasio está bueno y después tenemos el campo de golf y el polideportivo. Y si cuando terminás de trabajar querés hacer amistosos, llamás a cualquier equipo que esté en Mar del Plata y los hacés, como ya programamos nosotros”, agrega sobre la ciudad a la que también quisieron venir Racing Club y San Martín de San Juan, pero que el dueño del hotel, “Tato” Zarategui, les respetó la palabra empeñada a Instituto.

“Por todas esas cosas, para lo que nosotros buscamos y creemos que es lo ideal y lo adecuado, éste es el lugar”, dice el DT.

Una característica de la presencia de Instituto en Balcarce es la alegría con la que el plantel va a entrenarse y ya es un clásico el viaje en colectivo cantando. Incluso, a veces, el propio Franco se suma y hasta se prende en algunas bromas, como también sucede en el hotel.

“Ellos saben que cuando es momento de distraerse y bromear, trato de estar con ellos y hacer bromas. Yo los cargo a todos y ellos me cargan a mí o a ‘Perico’ (Pereyra), ‘Pichi’ (Franco), ‘Beto’ (Gómez) o al ‘profe’, pero después saben que cuando estamos trabajando, hay que entrenarse y les exijo a muerte. Lo entienden perfectamente”.

Ya sea obra de Videla, Rébola o Encina, generalmente los líderes del bullicio y las bromas, Franco resalta esa virtud de su grupo: “No hemos tenido problemas en el semestre que pasó y en este tipo de trabajos, en el que necesitamos estar sobre todo con buen ánimo, y transmitiendo nosotros hacia ellos, hay veces que ellos nos transmiten a nosotros ese buen ánimo, como la música arriba del colectivo para ir a entrenar, o para que se vayan metiendo en el entrenamiento, sabiendo que les duele todo y que se viene una paliza. Pero bueno, lo están tomando con una alegría que hace que todos estos momentos se sobrelleven de mejor manera”.

–El dueño del restaurante, Daniel, dice que Balcarce tiene el secreto de que todos los equipos que trabajan acá, logran el objetivo, ¿se le dará a Instituto?
–Ojalá. Ya lo dije, no sé si tiene el secreto, pero sí sabemos que es el lugar ideal para este tipo de trabajo. Después, si es cábala o no, no lo sé y tampoco me importa.

Aunque deja las cábalas de lado, más de una vez cuando hilvana una oración y parece venirse la palabra “ascenso”, Franco interrumpe, piensa, y continúa la frase evitando nombrar la ansiada palabra. “Soy muy precavido”, dice, y continúa muy metido en el trabajo de su Instituto.

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