Pasaron las semanas en las que el punto de ebullición del mercado futbolístico estuvo marcado por las contrataciones de varios directores técnicos. En esos días recientes, las posibles transferencias de jugadores quedaron a la sombra de las llegadas de Basile (a Racing), Martino (a Newell's), Pumpido (a Godoy Cruz) y Da Silva (a Banfield).
Ahora sí, definidas las cabezas de grupo de cada uno de los 20 planteles de primera, debería empezar a ganar espacio y figuración el movimiento de jugadores. Pero las previsiones auguran un libro de pases tranquilo, tanto en apellidos como en las cifras que podrían pagarse. Dos son los motivos. Uno no es nuevo: la situación económica de la mayoría de los clubes dista de ser lo suficientemente solvente para embarcarse en fuertes desembolsos. Más de una entidad podría ser inhibida por deudas para realizar contrataciones. Y la otra causa es más novedosa: a diferencia de otros recesos de verano, está vez sólo se permitirá un cupo de dos refuerzos. Los que participarán en la Copa Libertadores no tienen un límite en la lista de inscriptos para la competencia internacional.
El primer equipo en asegurarse los dos nombres es Atlético de Rafaela. Ambos son viejos conocidos de la campaña del ascenso que regresan. El que fue capitán, Lucas Bovaglio, procedente de Estudiantes de Guadalajara, y el goleador en la campaña B Nacional, César Carignano, desde Universidad Católica.
Sólo otras tres operaciones se concretaron: Federico Insúa, a Vélez, desde Bursaspor de Turquía; el ex Tigre Martín Morel a All Boys, desde Universitario de Lima, y Gastón Díaz, de Vélez a Lanús.
En cuanto a las salidas, el último día de 2011, Pachuca anunció el fichaje del delantero Guillermo Franco, que se va de Vélez para regresar al fútbol de México, donde entre 2002 y 2006 hizo 63 goles para Monterrey. En Liniers podría reflotarse el interés por el uruguayo Santiago Silva, que no tiene continuidad en Fiorentina.
Boca pudo haber sido el primero en cerrar una negociación resonante, pero los 2,5 millones de dólares que ofreció por el 50 por ciento del pase de Humberto Suazo fueron rechazados por Monterrey, que pretende venderlo de manera completa. No habría que descartar novedades porque el delantero presiona para venir a Boca. Falcioni también ve con buenos ojos a Mauro Obolo.
En Racing, la incertidumbre está centrada en la continuidad de Teo Gutiérrez, que esgrime una promesa verbal de los dirigentes para ser vendido ahora, si bien tiene contrato. Basile ya adelantó que lo espera para pasado mañana y que lo cuenta en su proyecto. Coco espera convencerlo para que permanezca un semestre más.
El presidente Cantero reconoció que Independiente "no está en condiciones de pagar el 100 por ciento de un jugador". Ramón Díaz le pidió un delantero importante (trascendió el nombre de Rubén Ramírez), que sólo sería factible con un aporte de dinero externo.
San Lorenzo también tiene serias limitaciones en tesorería para satisfacer los pedidos de Madelón de Diego Villar y del delantero colombiano Bacca.
Terminado el préstamo en Argentinos, Santiago Salcedo volvió a Lanús, aunque su deseo es regresar a Paraguay. En general, todas la tratativas hasta ahora son tibias. Aún no surgió el clásico pase denominado "la novela del verano", ahora que ya se acabó la función de los directores técnicos.
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