A menos de 24 horas de haber recuperado su libertad, el futbolista no quiso dar detalles de la causa que aún continúa su curso y dejó en claro que siempre fue optimista al respecto. "Más allá de haber una Justicia, también existe un Dios", confesó. A su vez, sobre su futuro futbolístico, expresó: "Tengo contrato hasta 2015 y yo quiero siempre lo mejor para San Lorenzo. Estoy a disposición del club".
Pablo Migliore habló desde la puerta de su casa, en una especie de conferencia de prensa, ante todos los medios que se acercaron para escuchar su testimonio, tan esperado, después de que se decretara su libertad tras 40 días de prisión. Más tarde, también pasó por los micrófonos de De Una, Un Buen Momento de Radio La Red, en donde amplió el panorama y se extendió un poco más, dando algunos detalles más sobre su estadía en Ezeiza y su presente. Lo más saliente fue:
EL REENCUENTRO CON SU FAMILIA:
“Fue muy lindo. Traté de estar con mis hijos y señora, sabía que iba a llegar ese momento porque hay un Dios más allá de la Justicia. No tengo palabras para describir lo que sentí cuando me reencontré con la mujer que amo. No esperaba nada de nadie más que de mi familia".
LA CAUSA:
“Todos los detalles los va a dar mi abogado. La relación que tengo con Mazzaro se la conté al juez. La relación que tenía era de hacía años, no tuvo nada que ver cómo fue la vida de cada uno de ahí en más. Cambié de abogados para intentar encontrar una salida. Mi único abogado fue Dios. A los abogados de antes y de ahora, no los juzgo. Al juez le dejé abierta la chance de que mi celular sea intervenido y de que estén al tanto de si me voy del país o a otra provincia”.
LA SITUACIÓN ACTUAL CON SAN LORENZO:
“Ante todo está el club, lo que haya que hacer para que el club esté bien, lo voy a hacer. No me preocupa que haya otro arquero. Hay que respetar el contrato (vence en 2015) pero no hablé con ningún dirigente. Mi segunda prioridad es San Lorenzo, estoy a su disposición, aunque no sé cuándo podré entrenarme ni jugar, no hablé de licencias ni de nada. Tampoco hablé con Palermo para ir a Godoy Cruz. Al hincha le digo que ojalá gane mañana, todavía no sé dónde veré el partido”.
LAS ENSEÑANZAS QUE LE DEJARON ESTOS 40 DÍAS EN PRISIÓN:
“Trato de pensar en positivo, no pensar en lo que pasó y lo que se dijo. De esa manera voy a seguir. ¿Preocupación por amenazas? Lo único que me preocupaba era no ver a mis hijos. No tengo miedo. Adentro se aprende a valorar a las personas que están al lado de uno en los momentos reales. Es mentira que quise suicidarme y no sé si arrepentirme, pero sí tomaré distancia de muchas cosas. Hoy no tengo códigos, tengo principios.
CÓMO ERA UN DÍA NORMAL EN LA CÁRCEL:
“Me levantaba a las 8, iba al gimnasio, comía, dormía la siesta, iba a correr dos horas, iba a hacer boxeo... Había días que tenía psicóloga, asistente social, educación. Trataba de pasar el tiempo lo más ocupado posible hasta la noche, donde me iba a dormir temprano”.
LAS RELACIONES Y SENTIMIENTOS POR SAN LORENZO:
“Volver a vestir una camiseta, sentir en una cancha y sentir cariño de la gente era mi sueño. Con la barra de San Lorenzo no tengo que aclarar nada. No sé como me recibirán los hinchas. Mi decisión pasa más allá de un contrato. La decisión la toma el club, los socios toman la decisión, no los dirigentes, a ellos les pertenece el club. Tengo una relación de amistad para con el club. Es el primer club que me compro el pase a mi y eso no tiene valor. La llamada de Claudia Pacheco (mujer de Maximiliano Vaccaro, segundo de “La Butteler”), la recibí, no la hice yo”.
Fuente: PlayFutbol
Editado por Pelu GOmez
@pelugomez91
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