
Por jugar "apenas" 32 encuentros y ausentarse en los restantes seis, el crack rosarino dilapidó la oportunidad de superar el récord de gritos que había anotado en la campaña anterior. Pero, así y todo, le alcanzó para sacarle 12 de ventaja a Cristiano Ronaldo (34 en 34 compromisos) y 18 a Radamel Falcao García (28 en 34 cotejos).
De esta manera, el rosarino obtuvo la distinción por tercera ocasión y aumentó el registro de los jugadores argentinos, que lo lograron 11 veces. Anteriormente, Alfredo Di Stéfano lo hizo en cinco oportunidades en Real Madrid, Mario Kempes dos en Valencia y Juan Antonio Pizzi una en Tenerife.
Pero no quedó solamente en eso: el capitán de la Selección argentina se hizo acreedor del tradicional Botín de Oro, otro premio que recibe el futbolista que más goles marca teniendo en cuenta todas las competencias del Viejo Continente (existe un sistema de puntos según la jerarquía de los torneos). Messi, además de proclamarse ganador del mismo, estampó otro récord porque nadie en la historia lo había hecho tres veces (2010, 2012 y ahora).
Mientras tanto, el mejor jugador del mundo descansa en Rosario, recuperándose de su lesión, y mañana pondrá en marcha los entrenamiento con el combinado "albiceleste", confiando que podrá estar desde el arranque ante Colombia (7 de junio en el Monumental).
Fuente: Playfutbol
Editado por Pelu Gomez
@futbolfanof
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